Después de una navegación tranquila, por aguas del Adriático, fuimos viendo la costa croata, para llegar al Puerto de Gruz a las 12:00 h, donde el capitán atraco con una facilidad sorprendente el buque en el puerto de Dubrovnik, tanto que el comentario general es que parecía que estaba aparcando un pequeño utilitario.
En el mismo puerto, y pensando en los gastos que podríamos tener, cambiamos euros en Kunas (1 € = 7 kunas) y justo frente a la oficina de cambio, tomamos el autobús de línea (1a o 1b) y nos desplazamos al casco antiguo o grad (la ciudad) por el precio de 1,40 Kunas, que nos llevó hasta las proximidades de la Puerta de Pile, que está a una distancia aproximada de 3 km. Aunque también podríamos haber tomado un taxi que por el precio de 10 € nos habría realizado el mismo recorrido, más cómodo y sin paradas. De hecho si el recorrido se hace para cuatro personas merece mucho más la pena coger un taxi, por la comodidad y rapidez.
En el mismo puerto, y pensando en los gastos que podríamos tener, cambiamos euros en Kunas (1 € = 7 kunas) y justo frente a la oficina de cambio, tomamos el autobús de línea (1a o 1b) y nos desplazamos al casco antiguo o grad (la ciudad) por el precio de 1,40 Kunas, que nos llevó hasta las proximidades de la Puerta de Pile, que está a una distancia aproximada de 3 km. Aunque también podríamos haber tomado un taxi que por el precio de 10 € nos habría realizado el mismo recorrido, más cómodo y sin paradas. De hecho si el recorrido se hace para cuatro personas merece mucho más la pena coger un taxi, por la comodidad y rapidez.