Tras el diagnóstico de enfermedad celiaca o de sensibilidad al gluten no celiaca, a todas las personas diagnosticadas se nos complica la libertad de poder viajar, de poder alojarnos o comer en cualquier establecimiento, necesitamos mucha más información y planificación que la de otras personas que no padecen esta enfermedad crónica, multiorgánica autoinmune, que lesiona primeramente el intestino y puede dañar cualquier órgano o tejido corporal, y que afecta a personas que presentan una predisposición genética. Y el problema es además, cuando este diagnóstico llega en edad adulta, tras muchos años de "enfermedad desconocida" en la que le organismo se va deteriorando e impidiendo llevar la vida que llevábamos antes, y que entre otras cosas nos gustaba viajar libremente.
Como ya compartimos cuando publicamos nuestra Crónica de la II Jornada Sin Gluten del Corredor del Henares, celebrada por la Asociación Viviendo Sin Gluten en el Centro Cívico El Cerro de Coslada, que ese evento se había celebrado el domingo 28 de abril de 2024, teniendo como objetivo principal la concienciación y visibilidad de la celiaquía y la sensibilidad al gluten no celiaca. En esta jornada, al "celiaco consorte o celiaco por amor", le tocó dar una charla o ponencia sobre Viajar sin gluten, intentando transmitir y minimizando dentro de lo posible la problemática a la hora de viajar con enfermedad celiaca, o también con sensibilidad al gluten no celiaca, ya que en ambas, se tiene que llevar una dieta de por vida sin gluten, y sin contacto cruzado/contaminación cruzada. Pero, valorando también, que aunque la gastronomía es una parte muy importante del viaje, este no se compone solo de comer, sino de disfrutar y disfrutare de esos lugares que luego se nos quedaran en la retina, en nuestra multitud de fotografías o videos, recordado las experiencias vividas, las personas con las que los hemos compartido...
Así que si nos queréis acompañar, vamos a intentar transmitir aquí, nuestra manera de organizarnos para viajar sin gluten, pero, claro siempre teniendo en cuenta también las palabras de José Ortega y Gasset: "Yo soy yo y mis circunstancias, y si no la salvo a ella no me salvo yo"
YO SOY YO Y MIS CIRCUNSTANCIAS...
Esta claro que las los celiacos y celiacas, así como familiares, tenemos que planificar muy bien nuestros viajes, para localizar establecimientos donde poder adquirir alimentos sin gluten, hostelería apta donde disfrutar de la gastronomía a poder ser local, o esa hotelería donde alojarnos. Por eso, nosotros tras nuestra experiencia del diagnóstico en 1997, con 37 años en la madre como "celiaca sintomática", nuestra hija de 11 años como "celiaca latente" y nuestro hijo de 7 años como "celiaco asintomático", hemos intentado siempre animar a viajar tanto a ellos, como a cada uno le sea posible, ya que es lo que nos llevaremos, pues viajar es vivir, aprender, compartir...
No es sencillo exponer este tema de viajar sin gluten, ya que, existen tantas formas de viajar y cada uno es un mundo. Varía según la edad, si viajas solo, en pareja, en familia, en grupo de mochilero, o aventurero, viaje organizado o por libre.
Nosotros, por distintas circunstancias de la vida, incluidos los últimos 7 años de "enfermedad desconocida", hasta el diagnostico de celiaquía con 37 años, no hemos viajado tanto como nos hubiera gustado. Pero, dentro de nuestras posibilidades, hemos recorrido y disfrutado en bastantes lugares de España, Portugal, Francia, Holanda, Bélgica, Italia, Grecia, Croacia, Eslovaquia... Y siempre con las mismas ganas de conocer lugares, compartir con personas y ver todo con los ojos de esos niños que fuimos y aún recordamos, aunque ya seamos unos felices abuelos.
VIAJAR ES VIVIR, PERO NOS SALE MÁS CARO...
Partiendo de la base, de que el principio de viajar no es la gastronomía, aunque sea una parte del viaje, no es la más importante. Lo importante es conocer lugares, su historia, sus tradiciones, sus monumentos, su cultura... aunque muchas veces os veamos limitados a conocer su cultura gastronómica algunas veces.
La enfermedad celiaca, es una enfermedad cara, y a la hora de viajar también, pagamos lo mismo que el resto de los viajeros, pero no tenemos la misma variedad de platos en los buffet de los hoteles, en los cruceros, en las cartas de los restaurantes...
Si viajamos por libre, tenemos más complicado tener donde comer o tomarnos algo.
PLANIFICA. NO TENGAS MIEDO A VIAJAR SIN GLUTEN
Teniendo en cuenta tres circunstancias: economía familiar, idiomas y dietas sin gluten, debemos planificar el viaje con más rigor, para comer fuera de casa.
Viajar por España, también supone planificación, ya que, no en todos los lugares vamos a encontrar las mismas condiciones, pues no en toda España, encontramos alimentos y establecimientos de hostelería y hotelería con seguridad para poder alimentarnos sin gluten. Y nos encantaría que en todos los lugares nos encontráramos como en
Cangas del Narcea (Asturias), gracia al proyecto de
Cangas sin gluten.
Viajar al extranjero, supone además de la problemática del idioma, el del etiquetado, que no en todos los países existe como en España, aunque, desde nuestra experiencia hemos perdido parte de este etiquetado, y se nos ha complicado algo más. Es aconsejable siempre llevar fichas explicativas en distintos idiomas, según donde viajemos, a nosotros nos han venido bien en distintos lugares.
Tenemos que valorar que todo se puede superar para disfrutar de un viajes inolvidable.
FORMAS DE VIAJAR
La verdad, es que
pueden existir tantas formas de viajar como personas viajeras, como muestra esta impresión de la camiseta, que lleve el día de la charla, representando el espíritu de bloggers, instagramers y videobloggers que anualmente no reunimos en el evento anual de
Birratour, al que este año nos ha sido imposible acudir, pero esperamos poder hacerlo en el 2026. Por no extendernos más lo hemos simplificado en dos:
VIAJE ORGANIZADO:
Dejando claro y por escrito en el contrato nuestra necesidades de alimentación desde el primer momento.
Eso si, pagamos como el resto, pero, no tenemos las mismas condiciones a la hora de las paradas o en los hoteles.
Llevar siempre algo sin gluten por si no encontramos algo en las paradas.
Siempre, y con tiempo, llamar o escribir a los establecimientos para confirmar que tienen opciones sin gluten, sin contacto cruzado y por tanto aptas para celiacos y celiacas.
VIAJAR POR LIBRE:
Este sistema de viaje, nos supone más planificación, pues tenemos que localizar establecimientos para comprar productos, conocer el etiquetado (si existe), localizar restaurantes y hoteles u otros alojamientos.
Leer las experiencias compartidas por otras personas celiacas o sensible al gluten, que hayan viajado a la zona, tanto en los blogs (que siempre son una hemeroteca), en redes sociales, en foros y en los listados de las asociaciones de celiacos que encontremos en abierto (no todas son así).
En España, disponemos de varias herramientas, y entre ellas la
App de Celicidad que nos ofrece bastantes establecimientos aptos, pero también grupos en Facebook y blogs serios, ya que si es a través de Instagram, tendremos que ir anotando cada una de las publicaciones que nos pueden interesar para planificar el viaje.
DESPLAZAMIENTO Y ALOJAMIENTO
En todos los casos, si vamos a comer en los establecimientos, aunque en su Web indiquen que tienen sin gluten, llamar o escribir para confirmarlo, ya que, sin gluten no siempre significa apto para celiacos, celiacas o sensibles al gluten.
En todos los casos que compartimos, es siempre necesario planificar bien y con tiempo.
CAMPING:
Nos da la libertad de poder realizar un "road trip" de un lugar a otro, montar la tienda de campaña y visitar la zona.
Nos permite llevar algunos alimentos, cocina muy básica y prepararnos comida para excursiones y rutas senderistas en las mochilas. Así como buscar restaurantes y otros establecimientos aptos.
CAMPER:
Nos ofrece aún más libertad que ir solo de camping, y normalmente podemos aparcar como cualquier otro vehículo. Eso si, no podemos cocinar en la calle, y esto nos hace, en principio acudir a un camping o zonas específicas. El descanso, es similar que en la tienda de campaña.
AUTOCARAVANA:
Nos ofrece aún más libertad, siendo para nosotros la mejor opción para realizar un "road trip", ya que podemos llevar más alimentos, conservarlos en el frigorífico, cocinarlos con una cocina más amplia, y descansar mucho mejor.
INTERRAIL
Una experiencia digna de vivir en la juventud, como hizo nuestro hijo en dos ocasiones y es algo que nunca olvidara, aún con los problemas que para encontrar sin gluten encontró.
Es que el problema de las comida se complica y depende de las ciudades en las que se detenga el tren, por lo que hay que planificar localizando tiendas, supermercados, productos y establecimientos.
Siempre, es aconsejable llevar comida en latas, al vacío... por si surge una parada inesperada o problemática.
ALBERGUE:
Es una opción muy menospreciada por muchas personas y por tanto desechada, pero, nuestra experiencia ha sido siempre muy positiva cuando viajábamos con niños celiacos, con alergias alimentarias... pues, estaban más preparados y con más seguridad que muchos restaurantes.
Eso si, las camas no son lo mismo, y hemos tenido experiencias de todo tipo. Pero cuando íbamos entre 20 o 30 personas excursionistas o senderistas, siempre es una buena opción para desayunar, cenar y estar reunidos.
APARTAMENTO O CASA RURAL:
Para familias celiacas como la nuestra, o grupos de amigos con miembros celiacos, sensibles al gluten, con alergias o intolerancias alimentarias, es una estupenda opción, ya que podemos adquirir los productos y cocinarlos tranquilamente.
Nosotros desde el diagnostico en 1997, saliendo solos, o con un grupo de amigos y amigas que realizamos entre otras cosas nuestro
"Campamento Otoño", y otro grupo con el que hemos realizado
"Campamento Primavera", es lo que empleamos como
"Campamento Base", para realizar turismo, excursionismo, montañismo o senderismo.
Salvo en las casas rurales de
Cangas del Narcea (Asturias), donde hemos podido disfrutar de un desayuno sin gluten incluido en el precio y también de gastronomía local el la población, con bastante variedad, llegando a sentir la Normalidad Social, gracias al gran proyecto de
Cangas Sin Gluten, capitaneado por
Celicidad.
Respecto a las camas, algunas no tienen nada que envidiar a las de cualquier hotel.
HOSTEL - HOTEL - PARADOR:
Ya existen bastantes establecimientos de hotelería que controlan la cocina sin gluten y sin contacto cruzado (contaminación cruzada), pero, siempre es necesario recordarlo a los responsables del establecimiento.
Podremos desayunar con tranquilidad, pero en algunas ocasiones las falta de productos o el contacto cruzado depende de los clientes que van al "Rincón sin gluten", se llevan los productos o utilizan la tostadora.
En el caso de buffet libre, aunque pagamos lo mismo, no tenemos las mismas opciones, tenemos que llegar al restaurante los primeros y mejor si nos sacan directamente la comida desde la cocina, para evitar cualquier contaminación producida por los los otros usuarios.
En la actualidad, todos los Paradores Nacionales, tienen menús con opciones sin gluten.
Por supuesto, en estos caso podemos contratar distintas variedades de comer, y según la categoría del establecimientos (aunque el tema de estrellas no es muy justo) tendremos una acogedora habitación y camas.
BARCO:
Una opción para buenas economías que podemos comparar con las ventajas de las autocaravanas, pero realizando el recorrido por la costa o ríos navegables, atracando de puerto en puerto.
CRUCERO:
Es como navegar en un hotel de buenas estrellas, que navega por mares y océanos.
Existen compañías navieras que ofrecen la opción de todas las comidas sin gluten y aptas para celiacos. Pero, igual que en los hoteles, hay que evitar los buffet libres y pedir que lo saquen de cocina.
El problema, puede ser en las excursiones y principio y final de viaje, por lo que tendremos que organizarnos nosotros y nosotras.
Siempre, tenemos que llevar información de los lugares a visitar y planificar bien las excursiones en tierra, así como el inicio y final del viaje.
GASTRONOMÍA:
En España, tenemos la suerte de disponer de unos cuantos establecimientos 100% sin gluten aptos par celiacos.
También una serie de establecimientos que llevan a cabo unos buenos protocolos, controlan y elaboran platos sin gluten y sin contacto cruzado.
Si deseamos comer en restaurantes, como siempre, tenemos que buscar información y planificar bien el viaje con los establecimientos.
Eso si, nunca, os fieis del listado de alérgenos, ya que en muchas ocasiones no sirve para nada, y solo lo ponen por se una obligación establecida, pero sin ningún control.
Para las personas diagnosticadas de celiaquía o sensibilidad al gluten, en muchas ocasiones es complicado poder disfrutar de la gastronomía local, pero siempre existen lugares que nos sorprenden.
Recordar, que no existe ninguna ley que obligue al establecimiento a atender a una persona celiaca o con sensibilidad al gluten, por lo que, no sirve de nada ponerse borde, sino todo lo contrario, va en perjuicio del Colectivo Celiaco, y conocemos establecimientos que antes cuidaban la cocina apta para celiacos, y por personas sin educación, han decidido dejar de atender a celiacos y sensibles al gluten.
VIAJA Y COMPARTE TU EXPERIENCIA
El colectivo de viajeros que no padece la enfermedad celiaca o la sensibilidad al gluten, comparte más sobre viajes que en comparación el Colectivo Celiaco. Y tiene asociaciones de bloggers de viajes.
Los bloggers celiacos han ido desapareciendo con el tiempo de una manera muy preocupante, y lo hemos comprobado en los más de 18 años que comenzamos a compartir sin ningún animo de lucro en el blog.
Tenemos que tener claro, que si los celiacos, celiacas y sensibles al gluten no nos ayudamos como colectivo y nos unimos, nadie lo va a hacer por nosotros.
Por eso, es recomendable compartir nuestras experiencias viajeras (mejor en un blog) que facilitará el viaje a otra personas celiacas o sensibles al gluten, así como a sus familiares y amigos.
Compartir no es poner fotografías en Instagram o Facebook sin explicar donde está el restaurante, datos sobre el viaje, tanto lo malo como lo bueno.
Al colectivo celiaco le falta mucha unión, y ha confiado demasiado en algunas asociaciones históricas a las que les ha faltado transparencia, teniendo en algunos casos unas directivas que sus intereses eran otros, y han desilusionado a muchas personas.
Dejar comentarios, que es lo que se denomina #propinagigital, en las App, en Google, en los buscadores de restaurantes, indicando que se puede comer sin gluten y que son aptos para celiacos, nos facilita la vida al resto y animamos al hotel o restaurantes a continuar elaborando y cumpliendo protocolos de seguridad para ampliar la variedad de los platos para celiacos y sensibles al gluten.
EL VIAJE COMIENZA DONDE EL RITMO DEL CORAZON...
La frase de Fabrizio Resca: "El viaje comienza donde el ritmo del corazón se expone al viento del miedo", es realmente lo que nosotros sentíamos de pequeños, esos nervios cuando salíamos de viajes con nuestros padres o abuelos, esas mariposas en el estómago. Esa sensación que aún no hemos perdido.
Realizar un viaje, supone abandonar nuestra zona de confort, lo que se nos transmite en nerviosismo ante lo desconocido. Los nervios, algo de miedo, de incertidumbre... ante lo que nos espera. Y en el caso de tener que alimentarnos sin gluten y sin contacto cruzado, la preocupación es aún más visible y lógica, por eso siempre tenemos que llevar ese "botiquín o maleta del celiaco", por si nos encontramos con problemas de encontrar donde alimentarnos.
Pero, ese nerviosismo, comienza cuando se planifica el viaje, se vive cuando se realiza, y se recuerda gracias a los recuerdos, fotografías y vídeos.
RODEARSE DE GENTE EMPÁTICA Y VIAJERA
Además de los expuesto anteriormente, siempre en la vida y más siendo diagnosticada la enfermedad celiaca o la sensibilidad al gluten no celiaco, es recomendable, y hasta imprescindible rodearse de personas empáticas, que entiendas la problemática celiaca.
En muchas ocasiones, la propia familia o amigos, son los responsables por falta de empatía y cuidado, de provocarnos un contacto cruzado (contaminación cruzada).
Y claro, una estupenda forma de viajar, es en grupo con personas que también sean celíacas o sensibles al gluten, que siempre facilitará en entendimiento.
LA AVENTURA, ES LA AVENTURA
Cuando viajábamos con nuestros hijos de pequeños, y surgía algún problema, siempre les decíamos: "La aventura, es la aventura", y siempre encontraremos una solución, teniendo que romper barreras, para disfrutar de la vida.
Por otra parte, como principio de vida, nosotros seguimos la frase de un escalador italiano llamado Guido Rey: "Solo vive de veras quien jamás se detiene".
Por tanto, que la celiaquía o la sensibilidad al gluten no celiaco, no os detenga o anule vuestras ganas de viajar, pero siempre tendréis que planificar, y nos os olvidéis luego de compartir vuestras experiencias como hacen los blogueros y blogueras de la
Asociación Madrid Travel Blogger, ya que, de esta forma abriréis camino a otras personas que deseen disfrutar de ese viaje, y si además agradecemos a los establecimientos de hotelería y hostelería, aún mejor.
Y como os hemos mencionado a la asociación de viajeros y viajeras a la que pertenecemos, también os queremos hablar de la
Asociación de Personas Celiacas y Sensibles al Gluten a la que también pertenecemos, y que es
Viviendo Sin Gluten, que desarrolla una gran labor.
¡Buenos viajes a todas y todos!
#Escribimoslovivido
Enhorabuena por exponer de forma tan clara y completa la forma de viajar sin gluten. Un abrazo de parte de Irene y mío.
ResponderEliminar¡Muchas gracias por vuestro apoyo siempre! Viajar sin gluten no es sencillo, pero dentro de nuestras posibilidades, tenemos que viajar.
EliminarAbrazos de Ana y Víctor