En muchas ocasiones, en una ciudad como Madrid, donde vivimos acelerados, recorriendo muchas veces las mismas calles, circulando por las mismas carreteras, desconocemos muchos lugares que se encuentran en esta ciudad, y creemos que esta Nave de Motores de Pacífico, es uno de esos lugares desconocidos para muchos habitantes de la Ciudad o Comunidad de Madrid, y también para personas de otros lugares.
A nosotros nos gustan los museos en general, y creemos que son un lugar en los que podemos aprender, analizar y valorar lo que se ha realizado tanto en todas las modalidades de aficiones o trabajos de la historia, y en este caso, de como conseguir generar luz para que en principio la Línea 1 de Metro funcionara desde Sol a Cuatro Caminos, y mucho más.
Los que ya tenemos unos años, y nos gusta la arquitectura, lo primero que siempre nos ha llamado la atención han sido los edificios que Metro tenía en la zona, muchos de ellos ya desaparecidos como muchos otros por la política de urbanismo despiadado con la historia de la ciudad, un urbanismo de especulación, sin pensar en el futuro respetando el pasado. Y estos edificios tampoco se han librado de esa especulación urbanística, aunque por lo menos nos queda el edificio de la Nave de Motores y algún otro en la intersección de las calles Valderribas y de Sánchez Barcáiztegui. Esta antigua Central Eléctrica de Pacífico, que también recibía el nombre de Central Térmica o Fábrica de Electricidad (Como ocurría con la Fabrica de Gas Madrid) o Nave de Motores, puede que se haya librado de la piqueta, por ser declarada el 11 e abril de 2013, por la Dirección General de Patrimonio Histórico de la Comunidad de Madrid: "Bien de Interés Cultural, Categoría de Monumento 2".
Para visitar este museo es restringida siendo necesario realizar reserva previa, tanto para la visita guiada como para la realizada por libre. Pero eso ya os lo contaremos al final. Así que vamos a entrar en esta Nave de Motores restaurada en 2008, y que ha vuelto a reabrir sus puertas el pasado 24 de noviembre de 2023, y a la izquierda de la entrada nos encontramos con este logotipo de Metro, que ha sido rescatado de la piqueta de uno de esos edificios vendidos y destruidos para realizar nuevas construcciones. Un logotipo construido con teselas para conseguir este mosaico, donde se ve que las letras antes eran mayúsculas.
En principio, el conjunto de edificios ocupaba unos 16.000 metros propiedad de la compañía privada que había diseñado y construido el metro de Madrid, en las zona de las calles Granada, Valderribas y Cavanilles. Estos edificios fueron proyectados por el arquitecto y urbanista Antonio Palacios (otro gran desconocido para muchos madrileños) y el proyecto de la instalación de la maquinaria por los ingenieros: José María y Manuel Otamendi (hermanos de uno de los fundadores de la empresa, Miguel Otamendi).
La verdad, impresionan estos tres gigantescos motores de barco de la empresa Sulcer Fréres de Winterthur, fabricados en Suiza, eran capaces de ponerse en marcha en cinco minutos, con una frecuencia de 150 rpm, capaces de producir 1.500 CV, conectados a un alternador tipo volante de 1.000 KW de capacidad, generando energía trifásica de 15.000 V. Y que tienen un eje de 6 metros de diámetro.
Aproximadamente, solo vemos la mitad de la altura del motor, ya que el resto se encuentra en el sótano y desde allí partían la galerías por donde discurrían los cables de cobre para dar salida a esta electricidad hacia los distintas subestaciones del metropolitano o a las centrales productoras de energía de Unión Eléctica (hoy Naturgy) o Santillana (hoy Canal de Isable II).
Sobre la Nave, se instaló un gran Puente Grúa que se desplazaba de un extremo a otro, para pode colgar las grandes piezas que se desmontaban, y montaban. Y al fondo de la nave, el Puente de Mando (como si de un barco se tratará), desde donde dado el gran ruido existente en la nave, se emitían señales luminosas para que los operarios pudieran verlas.
En la fotografía anterior, se pueden ver los acabado interiores de las paredes, se observa el diseño de los azulejos y teselas blancas, así como piezas de cerámica iridiscente con reflejos de cobre formando grecas en las paredes muy típicas del arquitecto Antonio Palacios. Además, el emplear cerámica era mu bueno para poder mantener limpias estas paredes de toda la grasa que se podía generar. También, el cuadro de las herramientas, algunas de gran tamaño, y muy especiales para toda la maquinaria existente, tanto en forma utilidad.
En el exterior de la nave, se instalaron los grandes depósitos de gasoil, con una capacidad de 125 metros cúbicos cada uno. Y que en la reforma, han quedado cubiertos por un jardín, donde se aprecian las torretas de ventilación, y al fondo la casa blanca que era la vivienda del director de esta Central Térmica, Fabrica de Electricidad o Nave de Motores de Pacífico.
ACCESO
La entrada en gratuita, restringido y exclusivamente con resera. Pudiendo realizar visita guiada, o por libre. Y además, toda la visita es apta para personas con movilidad reducida.
Visita guiada: En el caso de uno de nosotros que fue el que realizo la visita, fue con Marcos, que lo explico estupendamente, y se visita en unos 30 a 40 minutos.
Visita libre: También con reserva hasta agotar las entradas, y con un tiempo máximo igual.
CAMINOTAS
Es una visita muy recomendable para conocer no solo estos grandes motores, sino para entender las condiciones de trabajo en esa época, y máxime si gustan los museos del tejido industrial, algo que por desgracia en Madrid, escasean, y se han perdido grandes posibilidades de haber conocido la historia y la forma de con empresas como las empresas de electricidad y gas de la ciudad, que de los que no tenemos ni un solo museo en Madrid.
Nos quedan los Museo de Metro de Madrid, y el Museo del Ferrocarril - Estación de Delicias, pero podríamos tener muchos más, como de Gas Madrid, Unión Eléctrica, Gal... donde la única industria del turismo que es por la que llevan años apostando en este país, también le gustaría visitar aquella arquitectura industrial y su maquinaria.
Os hemos contado algunas cosas de este museo industrial, pero os recomendamos que vayáis a visitarlo y comprobéis su arquitectura, su diseño y muchos otros detalles. Como también, os recomendamos visitar: Andén Cero. La visita a la estación fantasma de Chamberí "La mejor del mundo" Inaugurada en 1919 en la linea 1 del metro de Madrid
Esta crónica turística, así como de otros lugares, siempre las encontraréis (según vamos actualizando), en: Carta Turística: Viajes, escapadas, senderismo, actividades, experiencias, naturaleza, lugares, rincones, ciudades, pueblos… Publicadas en blog.
#Escribimoslovivido
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