Había pasado la borrasca Celine, que había dejado bastante lluvia y viento, y teníamos pensado una ruta sencilla, pero llena de historia junto a 6 amigos y amigas, terminando con una comida en un asador de la población madrileña de Valdemanco, pero para ese sábado llegaba la borrasca Domingos, y por distintos motivos, el grupo de 8 se quedo en la mitad. Pero, viendo que según la previsión del tiempo, hasta la hora de la comida no llegaría el sábado 4 de noviembre Domingos, pues continuamos con la propuesta de hacer senderismo y terminar con gastronomía sin gluten, y una buena sobremesa.
La idea era hacer una ruta circular de unos 11 km partiendo de la población madrileña de Valdemanco y llegando a ella. Pero, por si el tiempo no nos acompañaba, pensamos en quedar en la población de Bustarviejo, tomarnos unos cafés en el Bar La Maruja, y dejar uno de los coches, por si el tiempo empeoraba, y con el otro irnos al Asador Roberto en Valdemanco, donde habíamos reservado mesa para almorzar y, así lo hicimos.
¿Nos acompañáis en nuestro caminar?
DESCRIPCIÓN DE LA RUTA
Existen distintos puntos desde donde se puede comenzar esta ruta, uno de ellos desde el Mirador de Valdemanco, donde existe una zona de aparcamiento, y unas bonitas vistas, en cualquier momento del día, y aún mejor en el atardecer. Otro desde la zona del Potro de herrar, pero tendríamos que atravesar un túnel bajo las vías que se comparte con el arroyo de Albalá, que estaba bastante crecido con las últimas lluvias. Así, que lo hicimos desde el restaurante en el que habíamos reservado para comer, y donde pretendíamos terminar la ruta. Por eso, comenzamos a caminar desde el mismo establecimiento, caminando por la acera de la Avenida del Desvío - Carretera M-610, hasta llegar a la Calle La Fuentecilla junto al Cementerio Municipal, donde nos desviamos en dirección sur hacia la vías lamentablemente abandonas del la línea ferroviaria Madrid-Burgos desde el año 2011, que cruzamos, para tomar la pista entre jaras, por un costado de la vía del ferrocarril. Y enseguida apareció es lluvia fina, ese chirimiri o engañabobos que penetra poco a poco y empapa.
Pero, además de la lluvia y el viento, nos fuimos encontrando con el camino lleno de lagunas y zonas inundadas por las últimas lluvias del la Borrasca Celine, que tuvimos que atravesar.
En algunas zonas no solo era el camino inundado, sino las zonas laterales formando charcas profundas, lo que nos hizo un poso complicado el pasar sin empaparnos los pies, algo nada aconsejable.
Cuando llevábamos 3 km caminandos bajo la lluvia, pasamos junto a la Laguna de Navaluenga, y el Arroyo de Navalengua. Llegando al punto más bajo de la ruta, junto a una explotación ganadera y las vías abandonas del tren. Y subimos una pequeña cuesta para llegar a estas vías, aunque luego recordamos que continuando un poco más por el camino, no era necesario haber subido esta cuesta, y nos encontramos frente a la Estación o Apeadero-Cargadero de Bustarviejo-Valdemanco. Donde tanta vida hubo en sus días de maletas e ilusiones viajeras, así como de grande bloques de granito que viajaban a muchos lugares del mundo. Pero, una nefasta decisión dejo todo el recorrido abandonado, y a estos pueblos abandonados de poder desarrollarse al tener una vía de ferrocarril, que podría haber sido un estupendo cercanías, aunque hubiera sido hasta Somosierra donde se hundió el túnel.
Continuamos caminando sin volver a cruzar las vías, en dirección al Viaducto de la Guaragüera, a 30 metros de altura sobre, con 169 metros de longitud, sustentado por 11 arcos y 12 metros de luz o anchura. Y en el fondo la carretera M-631
Con viento, cuando llevamos unos 4 km, atravesamos este viaducto construido con tanto trabajo de los presos del campo de trabajo forzado del Destacamento penal de Bustarviejo "Los Barracones". Y nuestros pasos continúan azotados por el viento y esa lluvia fina y fría, hasta la entrada del Túnel del Collado, también abierto con barrenos pico y pala sobre el duro granito por estos presos, con 248 metros de longitud.
Caminamos no muy lejos de la orilla derecha del Arroyo de Caragüeña, y llegamos cuando llevamos caminados algo más de 6 km, al Poligono Industrial La Mata, entrada a la población serrana de Bustarviejo, paso a paso por las calles de: Martín Esteban, del Barco, de la Fragua, de la Cañita, de la Fuente Grande, para llegar a la Pza. del Cerrillo.
Y esa Plaza de la Constitución, con su Ayuntamiento, y sus tendidos de granito para los festejos taurinos, y sus duros burladeros. Aunque, también han eliminado la sección que se apoyaba en la iglesia.
Tras observar este entorno urbano, continuamos por la calle de la Parra, para llegar al Bar La Maruja, donde nos tomamos uno vermuts y una rica ensaladilla rusa sin gluten, y decidimos no continuar caminando por la Cañada Real Segoviana los 5 km que nos faltaban para llegar a Valdemanco, ya que el viento y la lluvia arreciaba. Por los que tras secarnos un poco, tomamos el otro coche y nos fuimos a degustar en el Asador Roberto de Valdemanco.
Esta ruta senderista, esta crónica viajera, así como de otros lugares, siempre las encontraréis (según vamos actualizando), en: Carta Turística: Viajes, escapadas, senderismo, actividades, experiencias, naturaleza, lugares, rincones, ciudades, pueblos… Publicadas en blog.
Madre mía qué pinta tiene ese cabrito. Sólo por eso, aunque haga mal tiempo, nos animamos a hacer la ruta 🤣. Un abrazo 🤗
ResponderEliminarEse cabrito estaba exquisito y la verdad que la zona tiene mucho que ver y disfrutar. Abrazos pareja 🤗🤗
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