Tras el desayuno del domingo, más de la mitad de los componentes del “Grupo de Otoño” habían emprendido vuelta a Madrid. Ya solo quedábamos cuatro, y decidimos caminar sin prisa, partiendo de la misma Casa Xuaquín, por la carretera que une la población de Moal “Puerta de Muniellos”, con Tablizas “Centro de Recepción de visitantes de Muniellos". Este recorrido está considerado como un paseo, ya que no tiene dificultad alguna, pero entre ida y vuelta se recorren unos 11 km, por el Parque Natural de Fuentes del Narcea, Degaña e Ibias, haciendo Turismo de Asturias.
Mientras caminábamos, volvimos a recordar la primera vez que hicimos este recorrido con junto a nuestros hijos en coche, por aquella pista bacheada de tierra y polvo, donde las ramas y las zarzas ocupaban los bordes del camino, para llegar al Tablizas, y visitar por primera vez Muniellos en el año 1999.
Mientras caminábamos, volvimos a recordar la primera vez que hicimos este recorrido con junto a nuestros hijos en coche, por aquella pista bacheada de tierra y polvo, donde las ramas y las zarzas ocupaban los bordes del camino, para llegar al Tablizas, y visitar por primera vez Muniellos en el año 1999.
Por esta carretera, normalmente solo circulan a primera hora los vehículos de los 20 visitantes que tienen acceso ese día a Muniellos, y su regreso a lo largo del día. Por lo que es un camino sobre asfalto, por el que pasean los vecinos y algunos visitantes de Moal.
Es un trazado sencillo, sin cuestas, entre un paisaje precioso, que poco a poco nos acerca a Muniellos (El mayor Robledal de España, a la Reserva de la Biosfera). Pero que si nos hemos informado, nos puede ir transportando a la historia de esas personas que día a día realizaron este camino para explotar estos bosques. Y es que por este camino – hoy carretera – salieron en carro de bueyes, muchos troncos de grandes árboles para construir los barcos de la “Armada Invencible” en los arsenales de Ferrol.
En 1902 se funda la “Sociedad General de Explotaciones Forestales y Mineras Bosna Asturiana”, que construye en Tablizas un aserradero, y hasta una central eléctrica a orillas del río.
Este paseo, nos permite observar el Bosque de Moal desde abajo, los prados verdes, los distintos ejemplares de: alisos, sauces, avellanos, castaños, hayas, robles…, mientras el ruido del agua nos acompaña en todo el recorrido, con pequeños saltos, y sobrepasando las presas. Aunque, el caudal del río es muy pequeño este año de gran sequía.
El inicio es ancho, soleado entre huertas y alguna pradera con bonitos manzanos, uno de ellos destrozados por un oso. Un oso gourmet, al que solo le gustaban las manzanas reinetas, y por eso destrozó las ramas de los manzanos.
Poco a poco el camino se va haciendo más sombrío entre grandes castaños, que dejan caer sus frutos protegidos de pinchos sobre el asfalto.
A nuestra derecha vemos la construcción que protege las colmenas de los golosos osos, y que recibe el nombre de Cortín de Cadenas.
El agua va fluyendo por las paredes, la humedad aún en un año de pocas lluvias se vive en este recorrido entre avellanos de gran tamaño.
Gran parte del recorrido lo realizamos pegados al río, y justo donde la reguera Polleiros aporta sus aguas al río Muniellos ó Tablizas, encontramos las ruinas de una Central Hidroeléctica.
Y casi, sin darnos cuenta, entre la frondosidad del arbolado, llegamos a la puerta metálica que limita la zona protegida de Muniellos.
Continuamos paso a paso, hasta llegar a la zona de los antiguos aserraderos, hoy transformado en Centro de Recepción de Visitantes, hemos llegado a Tablizas.
Nos sentamos en la puerta a tomar ese sol de montaña, y descansar un poco. Y a conocer a un bonito perro que nos salió a saludar. A partir de aquí hay que contar con un permiso para poder Caminar por la Reserva Natural Integral de Muniellos – Parque Natural de Fuentes del Narcea, Degaña e Ibias como pudimos hacer nosotros en el mes de mayo.
Al poco, volvemos sobre nuestros pasos con dirección a Moal. con otra perspectiva de este camino, de esta carretera, al realizárlo en sentido opuesto. Y volver a ver a las vacas que pastan en los prados.
Al poco, volvemos sobre nuestros pasos con dirección a Moal. con otra perspectiva de este camino, de esta carretera, al realizárlo en sentido opuesto. Y volver a ver a las vacas que pastan en los prados.
El recorrido de ida y vuelta se puede realizar en unas 2 horas, pero nosotros lo hemos realizado sin prisa, sin controlar el horario, y disfrutando de todo lo que nos llamaba la atención durante el recorrido. El desnivel es mínimo, solo 84 m, y por tanto muy recomendable para realizar sin esfuerzo.
Y al ir llegando a la población de Moal, vemos a nuestra derecha el Bosque de Moal, por el que habíamos estado caminando como os contamos en Senderísmo ruta PR.AS-132 por el Bosque de Moal (Cangas del Narcea) a las puertas de Muniellos.
Este recorrido, pasará a formar parte de nuestra Carta Turística: Viajes, escapadas, senderismo, actividades, experiencias, naturaleza, lugares, rincones, ciudades, pueblos… Publicadas en blog.
Y al ir llegando a la población de Moal, vemos a nuestra derecha el Bosque de Moal, por el que habíamos estado caminando como os contamos en Senderísmo ruta PR.AS-132 por el Bosque de Moal (Cangas del Narcea) a las puertas de Muniellos.
Este recorrido, pasará a formar parte de nuestra Carta Turística: Viajes, escapadas, senderismo, actividades, experiencias, naturaleza, lugares, rincones, ciudades, pueblos… Publicadas en blog.
#escribimoslovivido.
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