Caminando por Allariz, y la senda arqueológica de Santa Mariña de Aguas Santas. #Ourense

Como habréis comprobado si leísteis la entrada: Crónica obradoiro pan sin gluten, actividades turísticas y gastronómicas #OUsinguten #AllarizGF, ese fin de semana, fue muy, pero que muy intenso y gratificante. Pero a la vez, un fin de semana lleno de buen rollo, buen ambiente,  complicidad, empatía, conversación sincera, alegría, amistad… Un evento que volveríamos a vivir, una y mil veces.

Nosotros, tuvimos la posibilidad de ampliarlo al lunes, y decidimos caminar un poco por Allariz y por su Concello. Para completar las actividades de ese fin de semana.

Es lunes, era día de mercado tradicional, así que tras descansar y desayunar sin gluten en  Hostal Restaurante Alarico, paseamos hasta el Campo de la Barreira, donde la Fuente circular de Ferro Caaveiro (1783), que queda rodeada de la gran variedad de tenderetes, con alimentos de la zona, muebles, herrajes, útiles de cocina, aparejos para el campo. 

Y como nos ocurre siempre que visitamos este tipo de mercado, adquirimos algunas cosas, y entre ellas buena miel de la zona y queso.

Y tras este paseo por el mercado, nos acercamos a visitar el cercano Real Monasterio de Santa Clara, y un último paseo por Allariz, donde visitamos su colección de arte sacro, donde destaca la llamada “Virgen Abrideira”, una estatua de la virgen realizada en marfil, y que al abrirse se puede ver la filigrana de tallas realizadas en su interior. Y tras ver las distintas obras expuesta, pasamos a visitar la iglesia, ya que el interior, donde entre otras cosas estas monjas cuidan, miman y crian gallinas y “pulardas de convento”, para la cooperativa Coren, no se puede visitar al ser de clausura.

Y ya que nos habíamos propuesto hacer un poco de senderismo, tomamos el coche para acercarnos a la población de Aguas Santas. Dejamos el coche en el aparcamiento habilitado a la entrada del pueblo, y caminamos por sus calles hasta llegar al  Santuario de Santa Mariña de Aguas Santas, que lamentablemente estaba cerrado, por lo que no pudimos visitar su interior.

Pero, como habíamos leído, se trata de un lugar muy especial, y la verdad es que en esa mañana de lunes, sin casi nadie en sus calles, nos pareció un lugar muy especial, cargado de simbolismo, de misterio, y máxime conociendo la leyenda que data del año 139 d.c. donde se cuenta que el prefecto romano Olibrio se enamoró de una pastora llamada Mariña, y al negarse a lo que el prefecto la solicitaba, y abandonar su fe cristina, fue martirizada de distintas formas, hasta que la decapitó, dando su cabeza tres golpes, y encada uno de ellos surgió un manantial de agua clara.

Tras dar la vuelta al santuario, no disponíamos de mucho tiempo, pero queríamos caminar un poco por la Senda Arqueológica, que partiendo frente a las escaleras de entrada al santuario, nos pareció muy apetecible de caminar.

Así, que fuimos pisando con cuidado la gran cantidad de hojarasca húmeda, que cubría las losas de este camino, de esta “corredoira”, para evitar escurrirnos, mientras admirábamos los viejos castaños de este frondoso bosque gallego.

Y cuanto más caminábamos, más queríamos conocer de esta senda, de recorrido circular de 2,5 Km. Un recorrido corto, pero lleno de historia, leyendas y sensaciones, al caminar los dos solos en silencio por este bosque.

Y llegamos el denominado “Asiento da Santa” (Asiento de la Santa), donde se dice que Mariña pasaba el tiempo sentada cuidando del ganado. Y que tanto tiempo pasó, que marcó con sus pies la roca.

Y continuamos caminando, hasta encontrarnos con nadie, pero si con un templo inacabado. Un lugar que como no habíamos leídos nada de la zona, nos sorprendió aún más, al encontrarnos con esta construcción.

Y que pudimos leer eran los restos inacabados de un templo románico de sillar granítico, construido en el siglo XIII por los templarios, que recibe el nombre de basílica de la Ascensión, también llamada de la Asunción. Lo cierto es que es espectacular, por su construcción, y por el halo de misterio que encierra.

Vimos dos puertas, en una de ellas existe un cartel que no indica al telefono al que llamar para solicitar la llave, pero a nosotros amablemente nos había ya dejado una abierta. Así que bajamos con una pequeña linterna las escaleras, con el temor a podernos encontrar a algún animal que se hubiera protegido. Pero no nos encontramos con ningún animal, sino con lo que según parece los templarios, quisieron proteger y ensalzar: la cripta. Pero la Orden del Temple abandono su construcción al ser expulsados en el año 1312, quedando inacabada esta joya, donde se tuvieron que realizar ritos paganos e inicíaticos.

Esta cripta, dicen que pudo ser una sauna, horno o crematorio prerromano. Y lugar donde cuenta la leyenda intentaron quemar a Santa Mariña sin conseguirlo. Lo cierto, es que es un lugar que entrando como nosotros, los dos solos, con una pequeña linterna de led, nos causo una sensación extraña, una sensación de asombro y de respeto.

Una sensación de encontrarnos en un lugar especial, donde se han tenido que realizar rituales de distintos tipos, que pudo ser sauna de la Cultura Castreña o de los Gallaecos (habitantes de la Gallaecia), y posiblemente del cercano castro de Armea. Pero también se pudo usar como crematorio o “Forno da Santa”. Lo que está claro, es que es un lugar especial que los enigmáticos templarios quisieron proteger.

Con la pequeña luz, y la que pasaba a través de una ventana existente, fuimos fijándonos en todos los detalles que pudimos, y nos llamó la atención una piedra, que posteriormente supimos se trata de la “Pedra Formosa”, por la que se accede a lo que pudo ser el crematorio, y donde se encuentran: “Pedra Formosa”, pila labrada en roca, canales, altar, tapas de sarcófagos mediavales.  Y os aconsejamos leer todo lo que explican en la web de la Fundación Galicia Maxica.

Salimos de la cripta, muy sorprendidos por las sensaciones vividas en este lugar, y continuamos nuestro caminar, llegando a la zona conocida como “Penedo da Moura o dos Fornos”. Donde existen dos grandes piedra superpuestas, que la sabiduría popular gallega atribuía su construcción a los seres mitológicos llamados: “mouros”, constructores de todo los que no tenía explicación. Y curiosamente, por aquí pasaba la desviación de la Calzada Romana Via XVIII del itinerario de Antonino desde Allariz a Ourense.

Y muy cerca de esta piedra, nos volvemos a encontrar con otro lugar sagrado y misterioso: “Pioucas da Santa” (Pilas de la Santa). Lugar donde cuenta la leyenda que San Pedro, refrescó a las Santa Mariña, después de ser martirizada en el horno de la cripta. Estas pilas, siempre tienen agua en su interior, que dicen son beneficiosas. Y estaban a la sombra del gran “Carballo da Santa” (Roble de la Santa), que partió un rayo a mediados del siglo 20. Y se encuentran protegidas por un vallado de mampostería

Nuestra intención en principio era continuar el Senda Arqueológica circular o “Roteiro Arqueoóxico” y visitar el Castro de la Atalaia, Peto de Armea, Monte do Señoriño. Pero, aunque nos habíamos levantado pronto, las horas había corrido, y pensamos si dar la vuelta por el camino recorrido hacia el coche, ya que nos quedaban muchas horas de camino hacia Madrid.

Y mientras lo pensábamos, escuchamos fuertes ladridos que venían de las proximidades del camino que teníamos que seguir, así que nos decidimos por volver sobre nuestras pisadas. Lo curioso, es que al llegar a Aguas Santas, en el camino nos esperaba un impresionante mastín.

Pero este mastín, era tan grande como cercano y cariñoso, y nos acompañó en nuestro caminar hacia el coche, después de haber disfrutado de una camino precioso e inolvidable en otoño.

El regreso fue algo pesado, ya que nos acompañó la niebla desde La Puebla de Sanabria (Zamora), hasta casi la Sierra de Guadarrama. Pero aún así, volveríamos a repetir este recorrido, este caminar, ya volvimos muy satisfechos de todo lo vivido en Ourense y Allariz.

Este recorrido, este camino, pasará a formar parte de nuestra Carta Turística.

#escribimoslovivido