El pasado sábado, cuando el sol comenzaba a salir, estábamos ya en el bosque, entre pinos. Al llegar el paisaje estaba helado, las gramíneas lucían su traje blanco y la gran cantidad de plantas rastreras, con sus hojas de color verde intenso, ribeteadas con un blanco hielo, el suelo crujía a nuestro paso. Luego el día fue esplendido, soleado, con un aire fresco, limpio, que hacía aún más agradable nuestro caminar.
Cogimos nuestra cesta de bello castaño, que nos fue regalada por nuestro amigo Juan Manuel y realizada por manos artesanas de las poblaciones del Valle del Ambroz (Cáceres) y junto con nuestros amigos Martín y Sergio, comenzamos nuestro caminar mirando al suelo, para así poder intuir, encontrar, descubrir y recolectar, esos exquisitos regalos que el suelo del pinar nos cede en época otoñal… los níscalos y otras setas.
Teníamos nuestras dudas de encontrar muchos ejemplares, ya que ha llovido aún poco por la zona que fuimos, y la tierra aún no estaba húmeda, pero poco a poco fuimos encontrando ejemplares, y cortándolos por el tallo con nuestra navaja, moviéndolos suavemente para que depositen sus esporas en la tierra, e introduciéndolos poco a poco, sin dañarlos en la cesta. Así durante casi cuatro horas, caminando mirando al suelo, ascendiendo, bajando, agachándonos, separando maleza, limpiando suavemente el terreno para conseguir estas joyas del bosque.
Luego en casa, llego la hora de repartir el botín, de limpiar, de lavar, de trocear y de degustar una especie que recogió Martín, y que él llama “Sombrerete”. Una seta blanca y que una vez preparada a la plancha, se convierte en un hongo fino y exquisito. Y como habíamos preparado pasta fresca, lo combinamos consiguiendo una mezcla realmente exquisita.
Con nuestra parte del botín, preparamos un plato sencillo de NÍSCALOS CON PATATAS Y COMINOS, y el resto lo salteamos con un poco de aceite de oliva virgen extra, lo dejamos enfriar y lo introducimos de 500 en 500 gramos en bolsas de congelación y para ultracongelarlos, ya que estos primeros níscalos son los más sabrosos de la temporada que acaba de comenzar, y con ellos algún día realizaremos los platos de NÍSCALOS AL ESTILO DE NUESTRA CASA, o si nos apetecen de otra manera, podremos realizar el plato que aprendimos en tierras cacereñas… NÍSCALOS AL ESTILO DE GUADALUPE.
Si os gusta la recolección de setas, el sabor de las mismas, o simplemente el caminar por los bosques en esta época de tonos ocres, anaranjados, amarillos y esa luz que al atardecer se hace especial. Os deseamos una buena temporada otoñal. Nosotros intentaremos recolectar otro día algunas setas más, pero como siempre con mucha precaución y conocimiento de lo que se coge, así como de no deteriorar el entorno que nos acoge.
#escribimoslovivido
UAUUUU!!!
ResponderEliminarQué envidia más gorda me daissss!!
Acá en Galicia, más concretamente en Pontevedra, estamos disfrutando de un otoño primaveral delicioso, pero nada propicio para que el monte nos ofrezca éstas delicias para los sentidos, no llueve nada de nada, cosa más que rara...yo estoy, entre encantada y desencantada... pero como no podemos disfrutar de todo, seguiremos aprovechando éstos deliciosos días primaverales y nos deleitamos con vuestra mágnifica recolección...otra vez será...
I love, love, love mushrooms.
ResponderEliminarTomaré nota de vuestro blog ya que me ha parecido muy interesante.
ResponderEliminarEn mi familia no hay celíacos pero sí tengo una amiga que tiene una hija con síndrome de down y que siempre estaba enferma hasta que por fin se dieron cuenta de que le pasaba lo mismo que a vosotros: celíaca. Le pasaré la dirección de vuestro blog, seguro que le va a gustar.
Ánimo.
Ummmmmmm!!!
ResponderEliminarque recuerdos.
De pequeña siempre iba a coger setas con mis padres y la familia, y llevaban carne y la hacian en el bosque con las setas.
Que bellos recuerdos aquellos, gracias por recordarmelos, con vuestras imagenes y comentarios.
Tienen una pinta estupenda esos niscalos con patatas .
Besos
Margot
Qué de recuerdos me han traído! De pequeña solía ir con mis padres en busca de setas allá en Patagonia. No he vuelto a hacerlo por temor a las venenosas! abrazotes
ResponderEliminarHuuuummmm, qué rico... nunca he recogido setas, y la verdad es que me da un poco de apuro pensar en recogerlas, ya que no sabría distinguir entre especies comestibles y venenosas y podríamos tener un disgusto... Precisamente hace unos días unos amigos muy campestres nos contaban sus experiencias recogiendo setas y nos animaron a hacerlo ahora, que es la época. No sé, no sé, quizás el año que viene :-) Un abrazo.
ResponderEliminarMe encantan las setas pero por mi desconocimiento de cuales se deben o no coger, nunca he recogido, así que he de conformarme con las que compro. No obstante hago unos ricos revueltos con ellas.
ResponderEliminarCreo que voy a dejar de venir aqui a la hora de comer porque se me abre excesivamente el apetito con vuestras ricas recetas.
Ayer estuve degustando muchas de las ricas tapas que ofrecen aquí en Badajoz en la Feria de la Tapa los bares, mesones y restaurantes que participan, uf! una delicia para los ojos y para el paladar. Lo malo es que no te dan la receta porque es "secreta". Así que no podré cocinarlas :(
Un abrazo
Así que hemos ido a setas ¿eh?
ResponderEliminarEs cierto que este no está siendo buen año de setas porque no cae nada de agua, pero bueno, con paciencia y conociendo lo sitios, como que se van catando. Yo ya he probado las de cardo e incluso ayer me trajeron unos boletus que hicimos a la plancha y estaban de muerte.
Las patas con níscalos y cominos ... ¡¡que buenas!! ¿Es muy típico eso de echar cominos? Porque mi madre las hace así las patatas guisadas y yo también, pero hasta ahora no había conocido a nadie que también los echara.
BUeno, un saludito por si me tiro 20 meses sin poder volver a entrar.
Que tengais buena temporada de setas.
¡HOLA A TODAS!, os agradecemos sinceramente todos y cada uno de vuestros comentarios.
ResponderEliminarMARISA:
Nos hace gracia tu frase de “qué envidia más gorda me daisss!!”, ya que sabemos que te gustan mucho los níscalos o rebollones.
Por aquí, también el tiempo es primaveral en lugar de otoñal, y cuesta bastante encontrar setas, ya que no llueve. Por el contrario, con este tiempo tan soleado, es estupendo salir a la montaña, por lo que el sentimiento lo compartimos estamos encantados y a la vez desencantados.
CYNTHIA:
Gracias por tu comentario, y sabemos que te gustan las setas, aunque no sabemos si en las Barbados tenéis níscalos, aunque seguramente si otras especies de hongos.
MAXA:
Gracias por tomar nota de nuestro blog y por parecerte interesante. Nos alegramos de que en tu familia no tengas ningún enfermo celíaco, y sentimos muchísimo que una amiga tuya tenga una hija con síndrome de dawn y que además sea celíaca, pero seguramente será una niña encantadora, cariñosa y muy sensible, como lo son todos los que padecen este síndrome, máxime cuando además tienen “el gen celíaquin”.
Gracias por tus ánimos, y deseamos muchísimo ánimo a ti y a tu amiga.
MARGOT:
Nos alegra haberte traído esos recuerdos familiares, esas excursiones y esos momentos maravillosos que seguramente pasasteis juntos, recolectando y comiendo en el bosque… ¡que tiempos aquellos!
Respecto a los níscalos con patatas y cominos, realmente están exquisitos.
PAMELA:
Te decimos lo mismos que a Margot, nos alegra haberte traído esos recuerdos familiares, pero en tu caso además en lugar de buscar setas por el bosque, lo hacías con tu padre en esa maravillosa tierra que se llama Patagonia.
Sentimos que no hayas vuelto a hacerlo, pero es cierto siempre hay que tener temor a las setas y es preciso conocerlas muy bien.
REBECA:
Sí, realmente están ricas. Respecto a lo de recolectar setas, es preciso ante todo ir con alguna persona que realmente conozca las especies comestibles, y nunca coger, arrancar, ni destrozar aquellas que desconozcamos.
Pero si tienes amigos “campestres”, y te animan a ir con ellos, sinceramente no desperdicies la ocasión de vivir esa experiencia, ya que es algo especial, aunque según está este otoño, seguramente habrá que dejarlo para el próximo año.
MARI CARMEN:
Nos alegra haberte recordado “aquellos días felices en Coca”, ya que con los esplendidos pinares que posee esta población, con una tierra estupenda para que aparezcan los níscalos y sin tener que realizar grandes subidas.
Sí, realmente lo pasamos bien caminando por el bosque, ya que el localizar los níscalos es una alegría, además también recolectamos unas cuantas castañas.
SHIKILLA:
Nosotros, muchas veces hacemos como tu, comemos setas cultivadas y exquisitos champiñones, ya que no siempre hay posibilidad de recolectar, aunque también solemos tener algunas desecadas de la zona de Soria. Lo que si es cierto, es que si se tiene desconocimiento, se duda, es mejor no coger ninguna seta y así evitamos problemas y comernos un rico revuelto con las compradas.
¡Que envidia!... poder degustar ricas tapas que tuviste la ocasión de probar en Badajoz, ya que como tu dices son una delicia para la vista y el paladar, nosotros pocas veces podemos degustar esas exquisiteces en miniatura, ya que la mayoría están sobre sendas rebanadas de pan, o al ser la receta “secreta”, no te indican si puede contener gluten.
Por cierto y hablando de Badajoz, desde aquí un recuerdo para todos tus convecinos que hace 10 años sufrieron la tremenda riada un día como hoy.
HANNAH:
Sí, “hemos ido a setas”, pero como tu bien dices no está siendo un buen año por falta de agua y porque cada vez hay más gente en los bosques. ¡Que suerte!, como se nota que tienes amigos “seteros”, que te llevan setas de cardo y exquisitos boletus, para que los prepares a la plancha y digas… “están de muerte”. Te comentamos que este fin de semana en la población de Pont de Suert el kilogramo de níscalos o rebollones estaban a 25 euros…
Realmente los níscalos con patatas y cominos están buenísimas, y que curioso, sin comentarlo hacemos una receta muy similar.
Esperamos que no te tires 20 meses sin volver a entrar en este blog, en que siempre eres bien recibida.
A TODAS:
Os deseamos un buen otoño, una buena temporada de setas, y que si camináis por el bosque y recolectáis, ante el desconocimiento no arranquéis ninguna especie que desconozcáis, no destrocéis ninguna seta y de las conocidas, llevarlas siempre en cesta perforada, para que las esporas se depositen en el humus del bosque y así podamos tener buenas temporadas, pero siempre recordar:
TODAS LAS SETAS SON COMESTIBLE. SÍ, TODAS… LO ÚNICO ES QUE SIGUIENDO LA FRASE “ESTAN DE MUERTE”, ALGUNAS ES LA ÚLTIMA VEZ QUE PODEMOS PROBARLAS… ¡PRECAUCIÓN!
Muchos besotes,
Ana y Víctor.